Tengo miedo

Después de todo... ahora tengo cosas más importantes en qué pensar.

Mis manos se ponen frías cuando cruza la idea por mi cabeza, mi sistema respiratorio se vuelve más lento y empiezo a sentir cómo mi pecho se contrae con una angustia...

¿Cómo, qué o a quién elegir? es la pregunta de siempre, en un universo lleno de matices en donde no hay una respuesta absoluta, sólo verdades fundamentadas en el deseo, el deseo disfrazado de miedo y de dudas.

¿Dónde estará la decisión más acertada? Pues esta vez quien responde tiene que ser el yo... ¿El yo producto de la sociedad o el yo producto de mi razonamiento?

Mi deseo no puede estar aislado, después de todo no soy más que construcciones imaginarias que se entretejen en el complejo mundo de un "nosotros" + un "ellos", para no convertir al yo en narcisismo.

Me pregunto si algún día encontraré la razón aislada, el Yo pensante, que abandona todos sus conocimientos para construir solamente aquellos que pueda comprobar a través de la razón.

Pienso... luego existo.
                             René Descartes

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