revelaciones


Las palabras sabias de Dios llegan a tu oído cuando menos te lo esperas, resuenan de pequeñas vocecillas que cobran una fuerza inigualable y sólo sirven para recordarte que sigue a tu lado y que si le das la mano, Él te ayudará a levantarte. Te mira por la ventana de tu vida y sabe justo lo que tiene que hacer, es entonces cuando los manda, "Ángeles, es momento de que hagan su trabajo", y vienen a ti a la misma velocidad que tus pensamientos.

Hoy me diste la mano, me siento débil pero no me dejarás caer.
Gracias por dejarme probar el sabor de la tristeza, que hizo que los trajeras a mi camino y de esa manera conocer la felicidad.

El maravilloso sentido de la vida,

Hay un cielo despejado con probabilidades de tormenta, pero soy más fuerte cuando estoy en tu balsa.

El milagro depende de mí, TÚ ya hiciste tu parte.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Piropos para nadadores

... compartiendo barbies